Se esperaba un acto sobrio, según aseguró el alcalde Abel Caballero, por solidaridad con el pueblo de Valencia tras los trágicos incidentes vividos con la DANA –incluso una pancarta en plena Porta do Sol colgada de un balcón recordaba lo sucedido–, pero lo cierto es que la expectativa generada era máxima y, un año más, no defraudó.
Con puntualidad, a las ocho de la tarde Caballero tomó la palabra para pronunciar un emotivo discurso en el que elogió la recuperación de la tradición de las fiestas navideñas desde Vigo. «La Navidad arranca hoy, dura todos los meses de este mes y el que viene pero el clima de la navidad tiene que seguir ilustrando toda España, toda Europa y todo el año, porque la palabra de la navidad es la paz», ha dicho.
Acto seguido anunció la novedad del acto del encendido de este año y es que primero se iluminaría el árbol de Navidad y después tendría lugar la cuenta atrás. Todo ello para rendir homenaje a las víctimas de la tragedia de Valencia.
Así, ante el asombro por parte de los asistentes, el árbol de la Porta do Sol se iluminaba con los colores de la Comunidad Valenciana y se hacía de inmediato el silencio en la Porta do Sol para escuchar el Himno a Valencia, entonado por Francisco.
Pasaban los minutos y la expectación iba en aumento hasta que, de nuevo, el alcalde volvió a tomar la palabra. «Las luces de Vigo son las luces de la Navidad y arrancaremos como todos los años, haremos nuestra cuenta atrás de diez a cero, arrancaremos en inglés, seguiremos en español e remataremos en galego. E inmediatamente empezará Happy Xmas, de John Lennon», anunciaba Caballero. Así, finalmente, presionó el botín de encendido tras la ya tradicional cuenta atrás en tres idiomas.
Acto seguido, un verdadero despliegue de luz, color y sonido dio la bienvenida, un año más, a la Navidad de Vigo. Y bajo el icónico árbol de Porta do Sol -epicentro de las fiestas navideñas acompañado este año por el gran ‘Bosque de Nadal’-, el regidor le dio al botón de encendido para iluminar, desde Vigo, la Navidad en el planeta.
Con los acordes de la música de Happy Xmas (War is over) de John Lennon, las 7.000 personas que abarrotaban la céntrica plaza viguesa vivieron un momento único lleno de emoción y entusiasmo.
Tras el tema de Lennon, Caballero volvió a tomar la palabra ya por última vez en un acto que se prolongó durante media hora: «Viva Vigo, Visca Valencia. La Navidad empezó el planeta. ¡Adelante!», concluyó para anunciar la apertura del árbol para que todos pudiesen disfrutarlo mientras abría el turno para las conexiones en directo de los distintos medios nacionales que cubrieron el evento.
Una vez dentro, el selfie con el alcalde vigués se convirtió en la imagen más buscada por parte de muchos de los asistentes, mientras que otros se limitaron a dejarse bañar por las primeras luces navideñas y el colorido espectáculo del árbol.
Las caras ilusionadas de los más pequeños se acompasaban con las expresiones de sus padres, abuelos, acompañantes y de las cientos de personas que se amontonaban a los pies del árbol y no quisieron perderse el acto de encendido más esperado en la ‘ciudad de las luces’.
Toda una gala y momento de excepción y que ya se ha convertido en toda una tradición para muchas familias de vigueses y viguesas pero también para visitantes y turistas.
Prueba del éxito del lema «The World’s best Christmas is in Vigo (La mejor navidad está en Vigo)» –heredero del «Where Christmas live (Donde vive la Navidad)»– ha sido también la presencia de un centenar de periodistas de una treintena de medios, presentes para retransmitir el acto.
Ya una hora antes del encendido, la Porta do Sol y la rúa Príncipe se fueron llenando de cientos de visitantes, que fueron recibidos poco antes de las 19:15 con música de Tina Turner, The Refrescos, Juan Luis Guerra o los grandes éxitos del verano como «El tiburón».
Controles de acceso
En una jornada marcada por los controles de acceso al recinto acotado de la zona del Nadal, a donde solamente se podía acceder por cuatro entradas peatonales en Doctor Cadaval, Carral, Policarpo Sanz y Príncipe, fueron muchas las personas que desde antes de las 18:00 horas esperaban la ‘apertura de puertas’ para poder hacerse con un lugar de excepción en Porta do Sol donde seguir el evento de luz y color.
La aglomeración de personas desde dos horas antes de la hora marcada y nada más ‘abrirse las puertas’ era total, marcada además por un estricto y exigente control policial y de medios de seguridad y Protección Civil que guiaban a los grupos de personas a los accesos más cercanos por las calles aledañas del Casco Vello, Príncipe o Náutico.
La zona de La Farola de Urzáiz y de Policarpo Sanz -donde se instalaron dos pantallas gigantes para seguir el momento más esperado en directo- también estaban atestadas de gente.
Y para los más precavidos, también se habilitó la posibilidad de disfrutar del momento en streaming, con señal en directo, aunque con algunas dificultades, ya que se produjeron algunos cortes en la retransmisión. Eso sí, el sistema estaba habilitado para escuchar el evento traducido a cinco idiomas (inglés, francés, alemán, sueco y portugués).
Y es que los 17 puntos de control de acceso habilitados en varias calles del perímetro central de la Navidad viguesa ya empezaron a funcionar desde las 17:00 horas de la tarde para asegurar que la cantidad de personas que iban llegando al recinto no superasen el aforo máximo.
Con todo, los más de 44 metros del icónico árbol de la Navidad viguesa coronado por su megaestrella gigante y su ‘Bosque de Nadal’ formado por 8 árboles ‘vivos’ de 8 metros de altura cada uno formando la V de Vigo, el nuevo paseo decorado de Elduayen -que desde Paseo de Alfonso une dos símbolos únicos de Vigo como son el Olivo y el Sireno-, la 420 calles iluminadas de la ciudad, la noria, el mercadillo navideño de la Alameda, de Bouzas o de Vialia, son ya desde este mismo sábado el mayor reclamo turístico para toda Galicia, España y parte del extranjero.
Se esperan días de mayor afluencia en lo que resta del mes de noviembre y durante todo el mes de diciembre poniendo a prueba el plan de movilidad y tráfico anunciado por Caballero para intentar evitar los problemas de pasadas ediciones.
Y con ello, horarios concretos para disfrutar del decorado y la iluminación navideña hasta pasadas las fechas de la festividad de Reyes.
En concreto, la iluminación de la ciudad se encenderá cada día a las 18:00 horas de la tarde y se apagará a las 00:00 horas entre semana (de domingo a miércoles).
Mientras, la hora de apagado de jueves a sábado, vísperas de festivos y festivos será las 02:00 de la madrugada, dos horas menos de lo que está establecido en el pliego del contrato donde se especifica que las luces estarían encendidas hasta las 04:00 horas.
Por su parte, las noches del 23, 24, 25, 30, 31 de diciembre y las noches del 1, 5 y 6 de enero las luces permanecerán encendidas «hasta más tarde», señalando que será «hasta el amanecer» en el documento aprobado por el Concello.