Se trata del dato más alto en lo poco que va de 2019 pero, según la previsión, se mantendrá como el mejor registro del año al menos hasta abril. El pronóstico apunta a una progresiva moderación del mercurio, que se quedará en 22 grados de máxima durante el festivo del 28 de marzo y en 20 grados el fin de semana, coincidiendo con los actos de celebración de la Reconquista.
La influencia anticiclónica se mantendrá al menos hasta el domingo, día en el que se representará la expulsión de los franceses, que el año pasado tuvo que ser suspendida por culpa de la lluvia. Los chaparrones incluso aguaron un poco la habitual ‘ocupación’ del Casco Vello durante la jornada del sábado, en la que los vigueses se echan a la calle en busca de un choripán.
En esta ocasión, no habrá que preocuparse en absoluto del tiempo ninguno de los dos días, ya que las altas presiones se encargarán de mantener lejos la lluvia hasta que comience el mes de abril.