Vigo se quedará sin conexiones aéreas desde este lunes, día 6, y durante un total de 25 días. El aeropuerto de Peinador estará así cerrado al tráfico aéreo durante casi un mes -se estima que vuelva a la normalidad el 30 de mayo- debido a las obras que se van a ejecutar para mejorar el pavimento de la pista.
Las actuaciones de «regeneración profunda» del pavimento, dentro de la obra de renovación del campo de vuelos, fueron adjudicadas a la UTE Padecasa, Infraestructuras Conelsan e Insae Infraestructuras por 23,6 millones de euros, incluyendo también en la obra la sustitución completa del alumbrado aeronáutico por tecnología led, la renovación del drenaje de la pista y actuaciones en la plataforma de viraje de los aviones.
Con todo, y según informan desde Aena, debido a la complejidad de la actuación, el aeropuerto se ve en la obligación de «suspender su actividad aérea» durante 25 días, entre el 6 y el 30 de mayo de 2024, evitando, señalan, «la temporada alta y atendiendo a los meses con la meteorología más favorable para el correcto desarrollo de los trabajos».
De este modo, explican que se han coordinado las fechas con todos los agentes implicados para que «reorganicen» su actividad en el periodo de tiempo en el que el aeropuerto estará cerrado al tráfico aéreo.
Así, las compañías aéreas han replanteado su plantilla de vuelos, trasladándolos en algunos casos al Aeropuerto de Santiago-Rosalía de Castro o aumentando la capacidad de sus rutas en los aeropuertos más cercanos.
Mientras, el resto de empresas que desarrollan su actividad en el aeropuerto, como restauración, alquiler de coches, transporte público o aparcamiento, también han adaptado sus horarios de servicio durante los días sin actividad aeronáutica.
Desde el aeropuerto avisan de que las otras actuaciones asociadas «a esta compleja obra se ejecutarán fuera de este período de inactividad», en horario nocturno, y sin afectación a la operatividad del aeropuerto.
Trabajos concretos a llevar a cabo
Más en detalle, los trabajos en la pista, de 2.385 metros de longitud y 45 metros de ancho, supondrán la demolición de más de 29.000 metros cúbicos de pavimento y se extenderán cerca de 71.000 toneladas de asfalto.
Desde el punto de vista de la sostenibilidad ambiental, se aprovechará todo el material posible de la demolición del pavimento del fresado para reutilizarlo en la obra.
Además, serán necesarios más de 13.500 metros cuadrados de pintura para la reposición de la señalización horizontal, cumpliendo con lo estipulado por la normativa vigente.
Para renovar la instalación de balizamiento se utilizará la última tecnología LED en las 820 luces aeronáuticas de superficie, reduciendo la huella ambiental lumínica, y se tenderán en torno a 223 kilómetros de cable.
Necesario vuelo de calibración
Por último, el cierre al tráfico aéreo por los trabajos en la pista contempla el tiempo suficiente para realizar toda la regeneración profunda del pavimento y el necesario vuelo de calibración del ILS Cat. II/III del aeropuerto para comprobar su correcto funcionamiento con las nuevas características de la pista.
No obstante, desde Aena contemplan que «si la meteorología fuese adversa», el aeropuerto de Vigo podría empezar a operar el 31 de mayo sin la radioayuda, a la espera de poder realizar el vuelo de calibración, atendiendo a las aeronaves habituales previstas en la temporada de verano en el aeropuerto.