El Gobierno de Vigo ha dado su visto bueno a la contratación de 19 conserjes para los centros educativos de la ciudad. Se trata de unos puestos que estaban pendientes de cubrir desde febrero después de que los anteriores contratos expiraran y no fueran renovados. Esta circunstancia había dejado a una veintena de colegios sin personal para abrir y cerrar las puertas, por lo que esa labor estaba siendo desempeñada por la Policía Local.
Este hecho desencadenó en su día las críticas del Partido Popular, que acusó al Concello de Vigo de “falta de previsión” y de hacer recaer sobre los agentes unas funciones que distan mucho de figurar entre sus prioridades. Además, exigían que se convocara una oferta pública de empleo en lugar de estar encadenando de forma continua contratos de seis meses para estos porteros vigilantes.
Esa es la duración de estos nuevos contratos, que entran en vigor con efecto inmediato y supondrán un desembolso de 325.000 euros para las arcas municipales. Tras informar de este coste, Abel Caballero ha cargado contra la Xunta de Galicia por ser quien tiene las competencias en materia educativa. No obstante, los gastos derivados del mantenimiento de las instalaciones corresponden a las administraciones locales.