Entre el 19 de enero y el 25 de febrero solo hubo seis días en los que no cayera una gota de lluvia en Vigo. Cada una de esas seis jornadas fue celebrada por los vigueses, cansados ya de tanto chubasco. Ahora parece llegar el premio a semejante resistencia. Después de esta acumulación de precipitaciones, casi de repente y a pesar de estar aún en febrero, la ciudad gozará de un tiempo primaveral a partir del viernes.
El pronóstico de Meteogalicia para Vigo indica que se superarán los 20 grados el viernes y el sábado. Esa temperatura máxima vendrá, como es de esperar, acompañada de cielos poco nublados o despejados, que se prolongarán al menos hasta que empiece el mes de marzo. No obstante, es probable que el termómetro no alcance ese nivel de los 20 grados el domingo y el lunes, aunque se quedaría muy cerca de él.
Ello es debido a la entrada de altas presiones, tan ausentes durante estas semanas en las que no han parado de sucederse borrascas con lluvia abundante y viento fuerte. Así, según el servicio meteorológico gallego, las máximas “ascenderán moderadamente” y “serán altas para este período”.
Además, marzo comenzará en Galicia con estabilidad atmosférica y cielo despejado en general. A partir del martes, aunque las altas presiones no desaparecerán, sí habrá “un mayor grado de inestabilidad por la entrada de bajas atlánticas”. Así pues, “irá en aumento la probabilidad de ver nubes y alguna lluvia ocasional”.