La Autoridad Portuaria de Vigo informó este viernes de que ha autorizado recientemente a la empresa Iberconsa Seafood Processing S.L.U. a proceder a la instalación de una planta fotovoltaica de autoconsumo, que estará situada en la cubierta de la edificación ubicada dentro de la concesión de la que es titular, en la explanada anexa al Muelle de Reparaciones de Bouzas. De igual modo, tanto Froiz como Frigoríficos de Vigo -que disponen de sendas naves en el Puerto Pesquero- han optado por esta fuente de energía sostenible en sus instalaciones, y se espera que Termavi -concesionaria de la Terminal de Contenedores del Puerto de Vigo- se sume también a esta iniciativa verde.
Además, el Puerto explica en un comunicado que ya se han instalado paneles solares en el edificio de sus oficinas centrales de la Plaza de la Estrella, en la Terminal de Transbordadores de Bouzas, y en el edificio de talleres, en el Muelle del Arenal. Próximamente, les seguirán el edificio de la Lonja, la Estación Marítima y el edificio de oficinas “Virxe do Carme”, en el Puerto Pesquero.
«El caso de la Lonja es, si cabe, el más singular, ya que la mejora de la eficiencia energética es uno de los capítulos más destacables dentro de su megaproyecto de “Lonja 4.0” o “Lonja del Futuro”, lo que la convertiría en la primera Lonja en funcionar con energías renovables», asegura la Autoridad Portuaria. En este caso concreto, la energía capturada durante el día en los paneles solares se acumularía en pilas de litio para poder ser utilizada de noche, que es cuando hay mayor actividad y consumo de energía. Por ello, la idea es instalar baterías con una capacidad de 172.297 kW/año, aprovechando el excedente de energía que se genera durante el día.
Por su parte, la Autoridad Portuaria de Vigo tiene prevista la colocación de una instalación fotovoltaica en el edificio de la Estación Marítima, formada por un total de 270 paneles con una capacidad de producción anual de 153.774 kW/año, lo que supone un 33% del consumo del Muelle de Trasatlánticos. Igualmente, en el edificio “Virxe do Carme”, en el Puerto Pesquero, se instalará 51 paneles con una producción de 29.445 kW/año, que se emplearán para el funcionamiento de dicho edificio, aprovechando al máximo la capacidad de su terraza.
Energía eólica para autoconsumo en Bouzas
Para completar estas actuaciones, la Autoridad Portuaria de Vigo está estudiando la posibilidad de instalar un pequeño aerogenerador de 100KW en el paseo que bordea la Terminal de Transbordadores de Bouzas. Aunque esta iniciativa aún está en fase de estudio, la finalidad de la producción sería solo una, el autoabastecimiento, y no la comercialización. Asimismo, se buscaría que la solución final tenga un mínimo impacto en el entorno.
«Con estas acciones, la Autoridad Portuaria de Vigo busca favorecer la sostenibilidad, la eficiencia y la autosuficiencia energética. Para ello, ha puesto en marcha, a través de la estrategia Blue Growth, diversos proyectos enfocados a la adopción de tecnologías energéticas innovadoras para mejorar la eficiencia y sostenibilidad energética del Puerto y su entorno», asegura.
Objetivo: 100% autosuficiente y renovable
Entre todas estas actuaciones -tanto las ya acometidas como las que se llevarán a cabo en el corto-medio plazo-, la Autoridad Portuaria de Vigo podría invertir alrededor de 5,5 millones de euros con el objetivo de convertirse en 100% autosuficiente y renovable en lo que a demanda eléctrica se refiere. De hecho, los aspectos medioambientales son uno de los pilares básicos de la política actual de la Autoridad Portuaria de Vigo, centrada en la reducción de emisiones y de consumo de energía eléctrica, así como la instalación de energías renovables.
En este sentido, su objetivo de cara a los próximos años es que no solo se alcance el nivel 0 del Green Deal (=pacto verde de la UE), sino que aspira a convertirse en un sumidero de CO2, es decir, quiere producir más energía que la que consume en la actualidad.
El Green Deal fija para 2050 el objetivo de cero emisiones y en 2030, un 50% menos, pero la Autoridad Portuaria de Vigo quiere adelantarse a esos objetivos y dejar de emitir gases contaminantes en un plazo de unos diez años. Hasta entonces, confía en reducir el próximo año al 30% los gases contaminantes, de acuerdo con el compromiso adquirido en la cumbre Our Ocean, celebrada en Malta en octubre de 2017.