Como se ha podido apreciar últimamente, el confinamiento ha permitido que la naturaliza recupere parte de su sitio. Además de bajar drásticamente las emisiones de gases, hemos podido ver a corzos campando a sus anchas por Matamá o a jabalíes adentrándose por Praia América. Pero no sólo en tierra, sino también en el mar estamos pudiendo disfrutar de divertidas imágenes, como las que dejaron este jueves los arroaces en Bouzas.
Allí, cerca del Paseo dos Peixes, que se encuentra abierto al público desde hace una semana, un buen número de ejemplares hicieron acto de presencia, amenizando así el paseo diario de los vecinos de la zona. Estos no dudaron en capturar con sus móviles el momento al tener tan cerca el espectáculo que brindaban los animales con sus apariciones.