Puede alcanzar los 22,5 nudos de velocidad punta, pero su principal característica es la eficiencia en el consumo, puesto que es capaz de recorrer más de 18.000 kilómetros, la mitad de una vuelta al mundo, sin hacer paradas para repostar.
El «Adastra» sorprendió este viernes a los pocos que recorrieron las aguas de las Cíes. Su silueta es inconfunbible. Un espectacular trimarán de 42 metros de eslora, 16 de manga y capacidad para 9 pasajeros y 6 tripulantes.
Habituado a recorrer todos los puertos del mundo para disfrute de su propietario, el magnate naviero multimillonario Anto Marden, sus travesías se llevan con máxima discreción. Procedente de la isla de San Marteen, en el Caribe, entró de madrugada en la Ría de Vigo tras realizar la singladura en apenas diez días.
Su destino, según declara su parte de navegación, es el Canal de Panamá. Cinco años duró la construcción de un barco que costó la friolera de 11 millones de euros y que en 2012 fue botado en los astilleros McConaghy Boats, en sus instalaciones de Zhu Hai (China).
El diseño exterior, construido en fibra de carbono, fue obra la compañía inglesa John Shuttleworth Yacht Designs, mientras que los interiores correspondieron a Jepsen Designs. Recibió el galardón al diseño más innovador en los Premios World Superyacht 2013.