En China, están en el año 4178. En el calendario árabe, en 1435. Y, en Vigo, en el 14 d.C., después de Caballero. Suena ‘heavy’, pero la historia de la ciudad se ha convertido en AC/DC. Y, desde que, en junio de 2007, tomó posesión Abel Ramón, estamos definitivamente en otra era, que nos obliga a recordar a César Augusto, quien al final de sus días, desde la colina de Capitolio miró hacia Roma y proclamó: “Te tomé de adobe y te dejé de mármol”. Si no dijo otra cosa el primer emperador no fue por modestia, sino porque en aquel tiempo aún no existían las escaleras mecánicas.
En cualquier caso, hay una huella en el paisaje de la ciudad que a los arqueólogos del futuro, dentro de dos mil años, les ayudará a datar perfectamente esta época: el AC/DC. Y es la desaparición de toda la epigrafía previa al acceso de Caballero al bastón de mando de la praza do Rei.
Porque hoy podemos encontrar letreros de ‘Alcaldía’ o ‘Concello de Vigo’ por todas partes. Pero hubo un tiempo en que no existía tal cosa. Porque cada regidor anterior intentó dejar su impronta. Carlos Príncipe presumía de su ‘Abrir Vigo al mar’. Lois Castrillo, de peatonalizar O Calvario. Corina Porro le sacó más partido a los tulipanes –que plantó en la Gran Vía- que Holanda en toda su historia. Y Manuel Pérez no presumió de nada, tal vez porque no había nada de que presumir.
Sin embargo, entre nuestros regidores en democracia hubo un pionero, que consiguió elevar un lema hasta niveles de insistencia propias de la era d.C. Porque Manoel Soto Ferreiro, alcalde nada menos que doce años desde 1979 a 1991, dejó una frase durante su mandato que llegó a colonizarlo todo hasta el paroxismo: “Por un Vigo mellor”.
En los años 80, era imposible no encontrarse este letrero estampado en bancos, columpios, marquesinas, porterías o canastas de baloncesto. Fue el símbolo de toda una época. Pero, cuando se cumplen treinta años después de que Soto dejase la alcaldía, aquel lema de “Por un Vigo mellor” ha desaparecido ya por completo de las calles. La última canasta de baloncesto con el letrero estaba en pie en 2012, hace una década. Estaba situada frente al cementerio de Bouzas y hoy ya ha sido sustituida. En la nueva cancha luce ahora el preceptivo ‘Concello de Vigo’.
Muchos vigueses aún recordarán el lema, que por cierto era muy brillante, de modo tal que se llegó a pensar que había salido del Think-Tank de la agencia de publicidad viguesa Ecovigo, autora de grandes campañas a escala estatal y de lemas locales inolvidables como ‘Madrid se escribe con V de Vigo’. Pero esta vez no fueron ellos.
De hecho, el autor de la frase fue el propio Manoel Soto. Lo contaba en 2012, en una entrevista que tuve el placer de hacerle, porque el ex alcalde, por desgracia fallecido en 2019, era un extraordinario conversador, con una capacidad retórica que siempre asombró tanto a amigos como a adversarios. “Mucha gente aún me menciona lo de Por un Vigo mellor –recordaba- fue una frase que funcionó. El autor fui yo mismo… un día nos reunimos para pensar un lema y nos salían frases grandilocuentes, hasta que yo dije: “Por un Vigo mellor”. ¡Ya está! Es un lema sin connotaciones políticas, que implica a todo el mundo, sencillo y sin partidismos. Queríamos transmitir identidad viguesa”.
La idea fue llevada a la práctica hasta el agotamiento. Era imposible encontrar un rincón de Vigo donde no apareciese la famosa frase. Que, además, tenía un estilo “grafitero”, porque los operarios municipales llevaban unas plantillas de cartulina y las pintaban con sprays por todas partes. Quien hoy en día se asombra de la proliferación de letreros de ‘Concello de Vigo’ es que no recuerda lo que fue aquello. Mientras que los más veteranos seguro que tendrán aún presentes las peroratas en cartel que se largaba el alcalde Portanet, algunas de las cuales aún se conservan en el paseo de A Guía, junto a la ermita… “Visitante: conserva y respeta este parque para solaz y esparcimiento de los vigueses como cosa tuya, ya que tú mismo has contribuido a crearlo”, dice todavía labrado en piedra uno de esos rótulos, firmado por Rafael Portanet. Así que no viene mal un poco de memoria histórica…
Pero volvamos a ‘Por un Vigo Mellor’. Treinta años más tarde, este es el momento histórico en que ya no queda nada del lema. Ha desaparecido la canasta de la calle Nigrán, frente al cementerio de Bouzas. Y sólo queda un rótulo en rojo en una marquesina de autobús en la carretera de Camposancos, en la parroquia de Oia. Y, también, en grandes letras rojas, en las ruinas de la antigua planta incineradora de Matamá, esta vez en su versión no normativa: “Por un Vigo millor”.
Incineradora de Matamá.
Imaginamos a los arqueólogos de dentro de dos milenios, ya sin vestigios epigráficos a los que recurrir… Tal vez no sepan nunca que, en los tiempos antiguos, hubo un lema que precedió al ‘Concello de Vigo’ y a su ‘Alcaldía’. Decía así: “Por un Vigo Mellor”… pero eso sucedió en un pasado muy remoto, antes de que la historia comenzase a contarse en AC/DC.
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