Esta raíz ha quedado atrapada en la alambrada de lo que antaño era “La gota de leche”, en la ciudad de Vigo, frente al propio Concello, entre la Rúa Pracer, la Rúa Granada y la Rúa Ronda de Don Bosco.
En las instalaciones de ese antiguo hospicio existe hoy un —eufemístico— centro de emprendedores cuya utilidad no es conocida por la ciudadanía, quizá porque tampoco se publicita adecuadamente; y sirve, además —y como puede comprobarse por la fotografía— como aparcamiento de vehículos —“autorizados”—.
Pero lo que realmente es un acierto es que en algunas de sus dependencias existe una guardería muy solicitada y alabada por las familias que la utilizan, y que resulta insuficiente en el entorno.
Como decimos, esa raíz se quedó atrapada en su momento con alguna tala de los arbustos que rodeaban lo que debería ser la totalidad del parque infantil, como si estuviera congelada en el tiempo y en la memoria de quienes vivieron allí una infancia que quizá no fuera tan feliz como la de los pequeños que actualmente aprenden y juegan en su guardería.