En todas las poblaciones existen imágenes como la que muestra esta fotografía, tomada en una céntrica calle de la ciudad de Vigo, un auténtico basurero improvisado. Sin embargo, estas actitudes no contribuyen a la buena imagen del conjunto de la ciudad, que en el caso de Vigo se esfuerza por su limpieza.
No basta con exigir al Concello que limpie las calles, sino que la propia ciudadanía también tiene que asumir su parte de responsabilidad para evitar los papeles tirados por el suelo, los excrementos de los perros sin recoger, y acciones como la que aquí se ve, que puede resultar hasta simpática por el aprovechamiento de los huecos de la verja de este negocio cerrado hace años, pero que en realidad produce muy mala imagen.