Esta fotografía no es un montaje; es una instantánea totalmente real. Nos la ha hecho llegar una lectora y en ella puede observarse a un hombre tendido en el asfalto con los pies apoyados en el bordillo de la acera.
Según nos ha contado, el hombre acababa de caerse por haber dado un mal paso porque los bordillos no siempre están bien visibles. Por suerte todo quedó en un susto. Lo cierto es que nadie pone en duda las grandes realizaciones urbanísticas que se están llevando a cabo en la ciudad de Vigo, sin embargo, quizá no sería mala idea buscar algún tipo de señalización para los bordillos, y quizá también alguna indicación similar a las londinenses pintadas en el propio asfalto —“”Look right», o “Look left”— para recordarle a los peatones que miren hacia ambos lados antes de cruzar, ahora que la situación se complica un poco más con la existencia del carril bici.