La cabalgata de Reyes en la ciudad de Vigo consiguió congregar a miles de personas a lo largo de su recorrido. El motivo general era el mar y, con tal motivo, las calles se llenaron de peces y de animales marinos, además de alegres comparsas ataviadas al respecto.
Los Reyes Magos, adecuadamente protegidos por si la lluvia se empeñaba en deslucir la celebración, repartieron ilusión a ambos lados durante todo el recorrido.
Algunas carrozas resultaron realmente espectaculares, como la de un gigantesco dragón realizado con cientos de globos, y otra similar que representaba un enorme pulpo.
Durante el trayecto se repartieron toneladas de caramelos, desde las propias carrozas e incluso con la participación de la Policía Municipal vestida de gala.
Algunas de las principales empresas comerciales de la ciudad también contribuyeron con sus propias carrozas, aunque la nota discordante la puso una conocida entidad bancaria cuya carroza era un simple cajón rectangular muy desangelado, impropio de una empresa que año tras año ve crecer sus beneficios y que podría haber sido un poco más generosa con la ciudad.