Las obras conllevan no sólo el embellecimiento de la superficie, sino también la renovación de los servicios soterrados, sobre todo los relativos al alcantarillado y al abastecimiento de agua de consumo. Todo ello evitará continuas averías relacionadas con la rotura de las conducciones, y permitirá, asimismo, que los desplazamientos, sobre todo el de los peatones, sea mucho más cómodo y agradable. Cierto que las obras siempre conllevan molestias y trastornos, pero los beneficios se podrán comprobar en un período de tiempo razonable, mientras duren las obras.