Salvo los propios vecinos, pocas personas podrán identificar esta pequeña calle que se muestra en la fotografía. Corresponde al barrio de Castro Castriño y el camino es perpendicular a la Rúa Tomás Alonso, a la altura del número 177, muy próximo a la curva de San Gregorio, en dirección a Bouzas. Parecido a este rincón también existen otros muchos lugares que sorprenden a la mayoría de la ciudadanía porque permanecen escondidos en la conciencia, a pesar de que se acostumbre a pasar frente a ellos. Cuántas veces habrán pasado muchas personas por la Rúa Tomás Alonso sin reparar en la existencia del Camiño do Castro Castriño. La barriada de Castro Castriño forma parte del barrio de Coia y en su entorno existen modernas edificaciones que coexisten con antiguas casas de pescadores y con el Colegio Hogar San Rafael.
Tampoco se debe olvidar una antigua casa de piedra de planta baja que aparece en una fotografía histórica detrás del tranvía cuando tomaba la curva de San Gregorio, se trataba, como decimos, de una pequeña casa de piedra que ahora, al cabo de los años, ya se ha derruido. Y más abajo del inicio de este Camino do Castro Castriño, en Beiramar, están los reputados Astilleros y Varaderos “San Gregorio”, de la compañía Freire, y también una pequeña instalación de pantalanes para barcos de recreo donde antes batía el mar contra las rocas. Está claro que, siquiera de vez en cuando, es muy recomendable pasear por los entornos alejados del centro urbano para descubrir lugares muy curiosos que escapan a lo cotidiano.