«Chalot se niega a entregar la plaza de Vigo. Don Pablo Morillo, elevado al rango de coronel por las fuerzas sitiadoras, ordena a la artillería de las fragatas inglesas Lively y Venus cañonear los castillos del Castro y San Sebastián, con incesante fuego, que duró hasta media noche.
Reconociendo la inutilidad de una resistencia a ultranza, falto de víveres, con escasas fuerzas, desmoralizadas por el continuo sabotaje de la población civil, Chalot decidió al fin entregar la plaza, tras diecisiete días de tenaz asedio, al amanecer del 28.
El regidor don Gaspar Masetti, que se había pasado al campo de las fuerzas sitiadoras, anunció este mismo día 27 por un emisario secreto, al alcalde Vázquez Varela el acuerdo de asaltar la plaza, a fin de que dispusiese a la población, especialmente a los hombres de la Milicia Honrada, para tomar parte en la lucha, llegado el momento decisivo.
La coordinación de esfuerzos entre los patriotas de dentro y fuera de murallas fue desde el primer instante muy estrecha, y al prestigio, energía y hábil política del alcalde Vázquez Varela se debe en gran parte el éxito de la Reconquista.
En la madrugada del día siguiente entraron en Vigo, triunfantes, los bravos paisanos. Pero ese ya es otro día».
27 de marzo de 1809. Xosé María Álvarez Blázquez. «La Ciudad y los Días. Calendario Histórico de Vigo» (Ediciones Monterrey, 1960).