Esta fotografía fue tomada hace varios años en la Rúa Triunfo de la ciudad de Vigo. Se trata de la procesión del Cristo de la Victoria, el acto religioso de mayor respuesta ciudadana. El propio día de la celebración, e incluso en los días previos a la celebración religiosa, pero sobre todo antes de la procesión, se forman largas colas para entrar en la Colegiata, la iglesia donde se guarda la imagen de ese Cristo tan venerado que según las leyendas existentes fue encontrado en el mar.
Lo de la victoria parece ser que viene por el triunfo contra las fuerzas de ocupación francesas en 1809, parece ser que de ahí viene el nombre de “Cristo de la Victoria”. Sin embargo, el Cristo de la Victoria también es conocido como Cristo de la Sal, cuyo nombre está basado en una historia que tiene más visos de leyenda que de realidad.
Se cuenta que la talla fue encontrada en alta mar por unos marineros que llevaban el barco cargado de sal. Después, cuando iban navegando, una fuerte tormenta amenazó el barco con la zozobra y terminaron encomendándose al Cristo, prometiéndole que llevarían la imagen a buen puerto y a una iglesia, y que acudirían a una misa en gratitud por la ayuda prestada. Sigue contando esta historia que la tormenta cesó de repente y que llegaron al puerto de Vigo. Sin embargo, olvidaron lo prometido. Durante tres veces intentaron salir al mar, pero cada vez que lo hacían se formaba una tormenta que los hacía volver al puerto. Hasta que se dieron cuenta de su promesa olvidada. Esa es una de las leyendas que explica el origen del nombre del Cristo de la Sal. Sin embargo, análisis posteriores realizados en alguna restauración no encontraron ningún resto de sal en la talla.
El origen del nombre relativo a la victoria es incluso más antiguo y también se le conocía como el “Buen Jesús”, nombre al que luego se le añadió la victoria: “Buen Jesús de la Victoria”. Sea como fuere, el Cristo de la Victoria está considerado como muy milagroso y la tradicional procesión anual resulta multitudinaria, acercándose a la ciudad de Vigo miles de personas llegadas desde otras localidades. Este año 2020, con las medidas preventivas para luchar contra la pandemia del Covid19, difícilmente volverán a repetirse esas imágenes.