La imagen parece el mejor complemento para escuchar a Stan Getz y Joâo Gilberto interpretando cualquiera de sus composiciones legendarias que siempre nos transportan a paisajes paradisíacos y lejanos. Sin embargo, la fotografía está tomada en un romántico atardecer otoñal en el entorno de la ciudad de Vigo, y lo que observan esas parejas tras el muro es el oleaje rompiendo contra una escollera en primer término, y las islas Cíes a lo lejos recortándose contra el horizonte, con el reflejo de la luz del faro en lo alto de la isla norte para marcar la posición de un destino singular que ya descubrieron los antiguos navegantes y que hoy, sin duda, es uno de los lugares más atractivos para propios y foráneos.