Hasta ese momento muchas personas se veían obligadas a dar un rodeo para salvar las numerosas escaleras que ascendían por la Rúa da Segunda República. A partir de ahora será mucho más sencillo y más rápido. Se han instalado unas escaleras mecánicas totalmente cubiertas y amparadas del viento y de la lluvia, y que salvan todos los tramos de ascenso. En su entorno también se han distribuido pequeños espacios ajardinados, una placa informativa, y se ha puesto a la vista un histórico manantial que se ha recuperado y que se expone tras una lámina de metacrilato. Un completo acierto que pone la Rúa do Placer al alcance de todos.