Recordemos que Francisco Leiro es el autor de la escultura del “Sireno”, en Porta do Sol; de “Bañistas no areal” y “Nadadores”, uno en la Estación Marítima y otro en la Praza da Estela; otra escultura en la Universidad de Vigo; y otra pieza en la fachada del edificio que hace esquina entre Ronda de Don Bosco y la Rúa María Berdiales.
Es una lástima que la estatua que ahora comentamos, “El temporal”, no esté en un lugar más visible como se merece, y que ocupe un simple rincón en una instalación ferroviaria cada vez más ocupada por las máquinas expendedoras de billetes, que van sustituyendo a las personas que hacen un servicio en las ventanillas con gran amabilidad y eficacia.