La ciudad de Vigo dispone de un amplio catálogo de grafitis. Los hay de todos los tipos y existe una gran mayoría que son auténticas obras de arte urbano. Lo que nunca se había visto era un grafiti matemático. Y ahí lo tenemos.
Representa el sumatorio de la variable «n» desde 1 hasta infinito, de 1 partido por «n» más 1. Es un lenguaje matemático complejo que bien conocen —o debieran conocer— quienes cursen las matemáticas del bachillerato o de carreras universitarias de ciencias aplicadas o de tipo técnico, como las ingenierías, además, por supuesto, de la carrera de Ciencias Exactas.
Está claro que la persona que realizó esa pintada no era del todo ignorante en la materia. Pero a la incógnita de la pintada matemática, que consiste en determinar el valor de ese sumatorio, también se le añade la intriga de saber qué quisieron decir con la palabra “congrio”, a no ser que fuera una de las especialidades de ese bar que ha cerrado sus puertas y que está a la espera de un nuevo inquilino.