El paraíso de la fotografía existe, pero está mucho más cerca de nosotros que aquellos destinos de los históricos navegantes y aventureros de antaño. Son las Islas Cíes, a las puertas de la ría de Vigo, y la fotografía, tomada a gran distancia y con los medios de una época en la que la fotografía digital estaba por descubrir, tiene un halo de ensoñación que permanece con el paso del tiempo, un patrimonio que bien merece un reconocimiento oficial.