Esta imagen siniestra corresponde a una escultura del Cementerio Municipal de Pereiró, en la ciudad de Vigo. Este cementerio —-como casi todos los cementerios—- reúne diversas muestras de arte funerario, algunas de ellas muy curiosas y llenas de simbolismo. La escultura que muestra esta fotografía parece querer recordar que tras el ser humano siempre está la muerte al acecho como el último destino que nos espera.
No obstante, al margen de ese sentido trágico que nos trae a la memoria la obra ‘Del sentimiento trágico de la vida’, de Miguel de Unamuno, conviene resaltar el gran valor artístico de muchas sepulturas y panteones que pasan inadvertidas para el visitante, salvo por las visitas guiadas —-y teatralizadas—- organizadas por el Concello de Vigo.
El cementerio de Pereiró fue diseñado por Jenaro de la Fuente Domínguez e inaugurado en 1898. Entre las sepulturas más destacadas está la dedicada a los soldados repatriados de Cuba y Filipinas; la del propio Jenaro de la Fuente; la de García Barbón, gran benefactor de la ciudad; la de Cachamuiña, el héroe de la Reconquista; Concepción Arenal; Sanjurjo Badía; Taboada Leal; José Elduayen; Ricardo Mella; además de insignes personajes. Una visita recomendada que puede ser muy interesante desde el punto de vista histórico y artístico.