Hace poco he dedicado unas palabras de recuerdo a las churrerías que existieron en la ciudad de Vigo y también a las que aún se mantienen en actividad. El pequeño reportaje tuvo muy buena aceptación, seguramente porque los churros son muy populares. Pero siempre se quedan cosas en el tintero, aunque en este caso se trate de un tintero digital. Y quizá también porque el paso del tiempo obra en contra, con tantos recuerdos amontonados en la memoria.
El caso es que entonces no recordé esta pequeña churrería, que recordé en días posteriores. Sabía que tenía una foto y por fin la he encontrado. En ella puede apreciarse la pequeña churrería que existió hasta hace unos años en la Rúa Progreso, concretamente detrás del museo Marco, ese edificio de 1880 que durante años fue utilizado como cárcel y que también fue Palacio de Justicia, hasta que en 2001 terminó por convertirse en museo. La churrería de la que hablamos ocupaba un pequeño local, como puede apreciarse, sin embargo, la ciudadanía viguesa valoraba mucho sus churros y todavía sigue recordándolos.