Las luces de Vigo ya tienen sus propias pastas, tal como puede observarse en la fotografía. Son unos dulces que servirán para hacer un regalo singular o para un recuerdo de la visita a la ciudad donde vive la Navidad.
Las pastas, deliciosas y muy asequibles para todos los bolsillos, están hechas en Vigo y la caja muestra algunos elementos característicos de la ciudad: la fachada de la Colegiata, el Sireno, los Caballos de la Praza de España, la noria de la Navidad, y la Farola de Urzaiz.
Es justo felicitar a quienes han tenido este gran acierto al amparo de la iniciativa del Concello de Vigo de promocionar las luces de Navidad, con el alcalde Abel Caballero al frente, una iniciativa turística que mueve millones de euros, que genera cintos de puestos de trabajo, que trasciende incluso al extranjero, y que es imitada por otras grandes ciudades. Ahora sólo falta que también imiten estas pastas, aunque las luces de Vigo siempre serán nuestras.