Hace muchos años que tomé esta fotografía de la entrada de Madame X, un establecimiento dedicado a ortopedia y juguetería en la Plaza de Compostela de la ciudad de Vigo. Durante mi niñez, para mí sólo era una juguetería. Igual que los desaparecidos almacenes Tobaris, ubicados en la Rúa Marqués de Valladares, que tenían un pequeño anexo en las galerías de La Norma, en la Rúa do Príncipe. Eran jugueterías de aquellos tiempos, igual que Moya, también en la Rúa do Príncipe. Igual que el Bazar de Villar, en la Rúa Velázquez Moreno, que ocupaba un local muy amplio de dos plantas donde había estado el Gran Café Colón. Después del Bazar de Villar, ese mismo local se convirtió en los Almacenes El Pilar y actualmente es La Casa del Libro.
Aquellas jugueterías de mediados del siglo XX eran el paraíso de los más pequeños en la ciudad de Vigo. En el comercio de Madame X me compraban las aletas y las gafas de bucear con las que me bañaba en verano en la playa de Samil y en la de Rodeira. Pero con el paso de los años, la atención ya se me iba para otros juguetes, en vez de las aletas y las gafas. En los últimos tiempos de su existencia, cuando pasaba por delante, siempre pensaba en todos aquellos recuerdos y en una de esas ocasiones decidí hacerle esta fotografía. Madame X lo cerraron hace muchos años, mucho antes de que pudiera surgirme alguna necesidad de tipo ortopédico derivada de la edad madura. Lo que siempre me intrigó fue el significado de esa letra X tan misteriosa, y hoy, a mis años, de quién era aquella mujer tan enigmática llamada Madame X. Nunca lo sabré.