En Santiago de Compostela han abierto un Museo de Magia. Está ubicado la zona monumental, justo enfrente de la iglesia de San Martín Pinario, en el número 5 de la Praza de San Miguel dos Agros. En realidad es una tienda-museo en la que el visitante puede experimentar con algunos pequeños objetos mágicos y observar otros que también resultan sorprendentes.
Muchos de los artículos están a la venta y otros son simplemente motivo de exposición, como el enorme tanque de agua similar al que utilizaba el mago de origen húngaro, Harry Houdini: la llamada “cámara de tortura china”. Con esa especie de pecera gigantesca realizaba un truco extraordinario. Lo sumergían boca abajo con el recipiente lleno de agua y totalmente sellado. Entonces, él golpeaba el cristal con una expresión angustiosa para darle más expectación al número de magia. Mientras, los ayudantes esperaban junto al tanque provistos de enormes hachas por si fuera necesario romper los cristales. A continuación, cubrían el tanque con una cortina y, al cabo de unos minutos, Houdini aparecía fuera de la pecera, triunfante.
Obviamente, los visitantes no pueden probar el truco de la “cámara de tortura china”, pero pueden probar otros. Uno de los trucos más populares del Museo de Magia con el que todo el mundo se hace una fotografía es la mesa que aparece en la fotografía, sobre la que hay una fuente tapada. Al destaparla, aparece la cabeza de la persona que se preste a hacer el truco, consistente en colocarse en la parte posterior de la mesa introduciendo la cabeza por un hueco de la fuente.
El Museo de Magia, como decimos, resulta una visita muy curiosa y divertida para todas las edades, con la posibilidad de adquirir algunos trucos sorprendentes que, muy amablemente, explican a los visitantes. Un mundo lleno de magia que contrasta con la religiosidad de la ciudad compostelana.