Las continuas correrías de normandos y sarracenos, que entraban a saco en los indefensos pueblos de la costa gallega, habían ocasionado la despoblación total de Tuy. La ría de Vigo sufrió también la destrucción de los pueblos y aldeas que bordean su costa. Ordoño II manda con esta fecha al Obispo de Tuy, refugiado en Iria, se reintegre a su diócesis, más necesitada que nunca de la presencia de su pastor. (CF. P. Florez, España Sagrada, XXII, 35-38).
30 de enero de 915. Xosé María Álvarez Blázquez. «A Cidade e os Días. Calendario Histórico de Vigo» (Xerais, 2008).