El anuncio fue fabricado en su día por la empresa La Valencia Industrial en base al boceto de un dibujante jerezano apellidado Gómez. Fue instalado en su localización actual con el permiso de Jenaro de la Fuente, el arquitecto municipal de la época.
Lo que muchas personas desconocen es la existencia de un túnel que comunicaba la Porta do Sol con la Rúa Victoria. Se accedía entrando por una pequeña caseta que ocupaba parte del solar del edificio donde está el Banco de Santander, en la propia Porta do Sol, y llegaba por debajo de la Rúa Marqués de Valladares hasta el callejón llamado Travesía Primera de Victoria, donde aún puede observarse la entrada del túnel, que hoy permanece cegada.
El anuncio de Pedro Domecq de la Porta do Sol es una obra de arte que hoy forma parte de la historia de la ciudad de Vigo, y que figura como una pieza a conservar en el Plan Xeral de Ordenación Municipal, motivos por los que no se debiera permitir que quede oculto por la instalación de un puesto de venta ambulante.