En la fotografía puede observarse una malla metálica y varios pernos de gran tamaño incrustados en las mismas rocas que ayudan a mantener esa estructura evitando desprendimientos.
Sin embargo, aunque la solución pueda ser acertada, el muro lleva mucho tiempo sin que haya muestras de algún control, y no estaría de más el establecimiento de unas revisiones periódicas para evitar males mayores.