Desconocemos las bellezas ocultas en nuestra ciudad y luego nos sorprendemos cuando viajamos a otras poblaciones y observamos los edificios y los perfiles urbanos. La ciudad de Vigo, en concreto, tiene numerosos edificios de preciosa factura arquitectónica, además de pintorescos rincones en sus cercanías. Así es que, al caminar por las calles viguesas, también se pueden descubrir perspectivas que parecen desconocidas para la mayoría de los ciudadanos, como sacadas de otros lugares desconocidos. Sirva como ejemplo esta fotografía tomada desde A Ronda de Don Bosco. El edificio que se observa destacando sobre el resto constituye una esquina entre las calles Urzaiz y Gran Vía, frente a la conocida como Casa de la Peineta, y es obra del arquitecto Francisco Castro.