Esta calle de la ciudad de Vigo comunica la Avenida das Camelias con la Rúa de Menéndez Pelayo, a unos metros de la intersección con la Rúa Pi y Margall. Inicialmente se llamaba Rúa de Buenaga, desconociéndose el origen de esa denominación, sin embargo, a partir de 1920 está dedicada a Chile.
La Rúa Chile se caracteriza por su pronunciada pendiente y su curva cerrada en la parte superior, donde se pone a prueba la pericia de los conductores y la resistencia de los peatones, y donde está el centro de formación de conductores Autoescuelas San José.
La calle tiene otra curva en la mitad de su recorrido, coincidiendo con un pequeño ramal que la comunica con la Travesía do Romil. En ese primer tramo casi todo son viviendas, aunque también hay algunos garajes y destaca el Teatro Ensalle, que ha suspendido su programa como consecuencia del Covid19. Y unos metros más arriba del teatro está el local de una asociación particular de un grupo de montaña.
Justo en la curva inferior existe la Academia Vinfor y luego la calle desciende recta en un último tramo donde existe un taller de restauración de muebles, la clínica de Odontopediatría y Ortodoncia Infantil de la doctora Cano, y un taller de creación artística que hace esquina con la Rúa de Menéndez Pelayo.
Durante muchos años esta calle no tenía salida en su parte superior. Justo allí, ocupando la misma curva y donde ahora hay unas escaleras para facilitar el acceso peatonal, había una vivienda con patio en la parte trasera, donde, anecdóticamente, vivía la familia Valiente Pérez, compuesta por un matrimonio con dos hijos de corta edad. Cuando se abrió la Avenida das Camelias, que hasta ese momento había sido un conjunto de fincas y aún no tenía nombre oficial y todo el mundo la conocía como Avenida de Beatriz, esa familia tuvo que marchar a otra vivienda alejada de esa calle que hoy es un eje de comunicación importante para el tráfico urbano de la ciudad de Vigo.