Esta pequeña calle de la ciudad de Vigo resulta desconocida incluso para los propios ciudadanos. En el mejor de los casos, pasa inadvertida. Está ubicada en el centro de la ciudad, en el Casco Vello, tras el edificio del Concello, y comunica la Subida ao Castelo con la Subida á Costa. Antaño no era una zona recomendada para el paseo, sin embargo, la recuperación del Casco Vello, todavía inacabada, ya permite la visita. La calle conduce hasta el Castillo de San Sebastián, que puede verse al fondo de la fotografía y que en parte fue destruido al levantar el actual edificio consistorial en 1970, siendo alcalde Antonio Ramilo. A esta barbaridad urbanística hay que sumar otra pretensión.
En 1983 se planteó la posibilidad de derruir el resto del castillo, pero por suerte nunca se llevó a cabo. Sin embargo, se desvirtuó todavía más como consecuencia de la remodelación de la plaza que está frente al edificio del Concello, que aún sigue llevando el nombre de Praza do Rei —en honor al Rei Emérito—, y que se llevó a cabo en los años noventa. Por fortuna, la sensibilidad histórica actual ha permitido conservar y ensalzar muchos rincones de la ciudad de Vigo, y lo que queda del castillo de San Sebastián es visitado por numerosas personas que disfrutan de un entorno único con una vistas espectaculares.