Las fiestas navideñas han llegado a su fin. Se terminó el brillante espectáculo de tantas luces, la fiebre consumista de compras y regalos, las comidas copiosas, el ir de una casa a otra, de viajar… Esta fotografía, tomada en una calle de la ciudad de Vigo, lo deja muy claro: ahí tenemos un Papá Noel acompañado de su escalera y abandonado en el portal a la espera del camión de la basura. Es un buen símbolo de que todo es efímero, incluso las fiestas más multitudinarias.
Pero lo cierto es que las fiestas navideñas de este año en la ciudad de Vigo han sido un éxito rotundo. Con sus luces y una publicidad sin parangón en todos los medios, han culminado con un éxito mucho mayor de lo esperado. Han puesto a Vigo en la agenda de muchas personas, tanto españolas como extranjeras, marcándolo como destino prioritario de sus futuras vacaciones o para alguna visita esporádica. Por eso debemos reconocer que el listón ha quedado muy alto.
Sin embargo, es casi seguro que el Concello de la ciudad de Vigo, con su alcalde Abel Caballero al frente, todavía pueda mostrarnos alguna novedad el próximo año. No debemos extrañarnos de que muchas personas que ya nos han visitado, y otras que se han quedado con las ganas de hacerlo, probablemente ya estén reservando plazas para conocer la ciudad de Vigo, tanto en Navidad como en otras épocas del año.