Esta es la imagen sorprendente que ofrecía el centro de la ciudad de Vigo en la tarde del pasado viernes día 29 de marzo, luego de varios días de lluvias torrenciales. Resulta sorprendente porque normalmente no hay muchas personas paseando a esas horas en un día festivo, pero el impedimento de salir a la calle por las condiciones climatológicas conllevó una ocupación masiva de la Rúa Príncipe y la Porta do Sol, tal como se observa en la imagen, además de otras céntricas calles. Así fue, que coincidiendo con la Semana Santa, nativos y foráneos favorecieron un ambiente urbano y cosmopolita que resultó muy agradable y que ojalá se convierta en costumbre.