Y son muy pocas las personas que alguna vez han reparado en la placa que corona la entrada principal del edificio: “Instituto Santa Irene. Consagrado a la instrucción pública gratuita. Fundado por Policarpo Sanz e Irene Ceballos de Sanz. Año 1945”.
Actualmente existen numerosos centros educativos tanto en el núcleo urbano como en las afueras de la ciudad y poblaciones cercanas. Sin embargo, la oferta educativa no siempre fue tan numerosa y muchas chicas y chicos tenían que desplazarse diariamente a la ciudad de Vigo desde otros lugares como Tui, Ponteareas, O Porriño, Moaña, Cangas…, para poder realizar sus estudios. Por eso la contribución de este matrimonio de benefactores resultó fundamental para acercar la educación gratuita a toda la población.
El rincón que muestra la fotografía, poco utilizado —disfrutado— por los vigueses, tiene una fuente que era conocida como “fuente de las ranas”, al tener en los bordes de su periferia unos grifos en forma de ranas de cuyas bocas brotaba el agua, aunque las ranas ya no existen en la actualidad. El entorno resulta silencioso y se beneficia de la sombra de unos sauces, y con la presencia de unos bancos de madera, constituye un lugar apacible, pero todavía desconocido.