No sólo el Real Club Celta cumple un siglo. Porque 2023 es también el centenario del baseball en Vigo, donde nació el primer club de Galicia. Aquel verano, en el viejo campo de Coia, la primera novena del Vigo Baseball Club se enfrentó al combinado de una escuadra de la Armada de los Estados Unidos de escala en nuestro puerto. Y se iniciaba así la tradición del “rey de todos los deportes”, como presumía la prensa de la época.
Ya a comienzos de año encontramos en el Diario Galicia un llamamiento para formar el primer equipo, bajo el título “Un buen propósito”. El artículo afirma que “una persona amante de este bello deporte ha tenido la buena idea de reunir a los que simpaticen con él, al objeto de implantarlo en esta población, para cultivarlo y fomentarlo con verdadero interés”, explica la noticia, en primera página: “Las personas que practiquen este deporte y las que deseen aprenderlo pueden escribir a la dirección siguiente: “Base-ball. Apartado de Correos número 122, Vigo”, enviando su nombre y domicilio y puesto en el que juegan, o solamente expresando su deseo de cooperar al fomento de este deporte. Una vez recibidas las adhesiones se convocará a los inscriptos a una reunión para acordar lo más conveniente con el indicado fin”.
El 27 de marzo de 1923 se disputa el primer partido, en el campo de Coia, cedido por el Real Vigo, en el que tomaron parte “dos novenas capitaneadas por el señor D. Ricardo López Campos y don Manuel García, respectivamente”. Entre los jugadores participantes estaban los cónsules en Vigo de Cuba, Ramón Bassols, el de los Estados Unidos, Mr. Henry T. Wilcox, y el de México, Ernesto Varela.
La crónica concluye con unas notas de sociedad muy propias de la época: “El campo estuvo animadísimo, concurriendo a ensalzar la belleza del deporte varias damas”, entre las que se contaban las esposas de los jugadores participantes, incluyendo los tres miembros del cuerpo consular.
Como casi nadie conoce las reglas del deporte del guante y del bate, se toma la decisión de repartir gratuitamente por Vigo ejemplares con la normativa. Lo cuenta el periódico Galicia el 23 de abril de 2023. Para un nuevo amistoso, la entrada en el campo de Coia era gratuita y los jugadores debían presentarse a las nueve de la mañana. Además, se llevaron a una imprenta unos reglamentos, que fueron distribuidos gratuitamente al público “al objeto de que la afición se entere más detalladamente del desarrollo de este juego”. El diario anima a los vigueses a acudir a Coia “a presenciar lo bello entre lo bello, al “rey de todos los deportes”, y no dudamos en que saldrán altamente complacidos”. El periodista destaca que ya existen equipos en Madrid, Barcelona y San Sebastián: “¿No se podrá conseguir en Vigo el mismo éxito que el obtenido en otras poblaciones españolas?”.
El 19 de abril de 1923 se había celebrado la primera Junta Pro Base-Ball, para promocionar en Vigo este deporte. Además, desde la primavera de este año había entrenamientos todos los sábados en el campo de Coia, en los que participan voluntarios que explican a público y jugadores el reglamente del que la prensa viguesa de la época insiste en denominar como “el rey de todos los deportes”.
En verano, ya estaba constituido el Vigo Base-Ball Club, que cuenta además con dos equipos para disputar partidos de exhibición. Además, comienzan a aparecer en prensa crónicas deportivas especializadas, como la del diario Galicia del 10 de julio de 1923, donde se destaca, junto a la victoria por 32 carreras a 12, la gran ovación que el público de Coia tributó al jugador González “por recoger una pelota largada en línea”. En agosto, en primera página de Faro de Vigo ya aparece una foto del equipo y directivos del recién fundado Vigo Base Ball Club.
Tras este primer equipo llegaron otros, como el Alas al Sol, el Soler, el Fuerzas Rojas, el Mudos, la Sociedade Atlética de Vigo, el Bosco, el Ateneo de Vigo, El Pilar, la Sociedade Rías Baixas, la Unión Viguesa Béisbol Club, el Vigo Runners… Además, se celebraron en Vigo diversos torneos de prestigio, como el Campeonato de España juvenil de 1975, en Barreiro, otro Nacional en Samil en 1982, además de diversas pruebas internacionales, como el Trofeo Fiestas de Vigo de 1967, que desplazó hasta la ciudad a un equipo estadounidense de la base aérea de Torrejón de Ardoz.
Los Halcones de Vigo y el Trasnos de Vigo, con un mérito enorme, han sido los últimos clubes que han hecho historia en la ciudad con este deporte que ahora cumple un siglo entre nosotros.