El vigués barrio de Coia esconde rincones muy agradables para disfrute de sus propios vecinos y para quienes se aventuran a dar un paseo por sus calles y parques. La fotografía, por ejemplo, muestra el final del barrio, donde existe la conocida fuente del volcán, que expulsa agua de modo intermitente, además de esa fuente con una refrescante cortina de agua cortada a veces por la brisa del final del verano. Esa misma fuente, al poco de su inauguración, incluso sirvió de refresco para los más pequeños en los días de canícula. Pero el barrio de Coia también esconde rincones verdes y tranquilos con la sombra agradable de frondosos árboles. Un barrio que ha ido mejorando con el paso de los años.