Esto ocurre con frecuencia en las ciudades costeras, donde las gaviotas forman parte del entorno marítimo y de la propia ciudad. Incluso algunas poblaciones distantes de la costa tienen sus propias colonias de gaviotas que han aprendido a sobrevivir aprovechando otros residuos y alimentos diferentes de los marinos; al fin y al cabo, las gaviotas son aves carroñeras y lo aprovechan todo. Pero esta gaviota de la fotografía parece formar parte de la familia y espera con paciencia su ración cotidiana, como si se tratara de algo natural, porque es una gaviota de toda confianza.