Al margen de las controversias que conlleva la Navidad de Vigo y que ya se comentan en otros foros, es preciso admitir que el conjunto de esas fiestas resulta un negocio de proporciones gigantescas y que uno de sus atractivos principales es la noria. Es obvio que la ubicación del artilugio no es la mejor, considerando los problemas que conlleva para la circulación, además de los ruidos. Pero es una atracción singular y muy rentable que otras ciudades han sabido establecer como recurso turístico permanente. Ahí tenemos, como ejemplo, la gran noria de Londres (London Eye), un espectáculo que funciona todo el año. ¿Por qué no se plantea el Concello de Vigo la instalación de una noria gigante y permanente en algún lugar adecuado? Incluso un teleférico como el que hay en Oporto y que podría conectar la zona portuaria con O Castro y otro también con A Guía, son proyectos que no resultan tan descabellados.