Se suele decir que son juegos con reglas exigentes y que ofrecen largas partidas de muchas horas. Pero también los hay muy accesibles, incluso para niños como puede ser “Memoir’ 44”, sobre la II Guerra Mundial (desgraciadamente descatalogado en castellano). Y quien quiera adentrarse en los juegos histórico-bélicos con más músculo, tiene ejemplos más sofisticados y para “adultos-aunque-noveles”. Opciones como “1775, La Guerra de la Independencia de los Estados Unidos” (editado por Másqueoca), un wargame muy sencillo, para dos a cuatro jugadores de diez o más años, que hace honor a su largo título y te sumerge en el conflicto americano.
Imagen procedente de masqueoca.com
Con el auge de los juegos de mesa, en España están surgiendo algunos pequeños editores independientes alejados del modelo de distribución por tienda (esto es, que venden sus cuidados productos solo a través de su página web). Un caso muy interesante es Trafalgar Editions, que acompaña sus juegos con libros de historia sobre los hechos que rodean a sus “wargames” (se venden por separado). Y esos juegos son dos, por ahora:
Waterloo 1815: La última batalla de Napoleón y Navíos de Línea: La batalla de Trafalgar.
Tanto “La última batalla de Napoleón” como “Navíos de Línea” participan de la densidad propia de los “wargames” y de su celo historicista pero, por decirlo de algún modo, “soltando lastre”: son juegos escrupulosos con los conflictos que evoca, exigentes, pero que no están pensados solo para tahúres “avanzados”. En plata, su moderada complejidad es poca cosa comparada con, por ejemplo, el clásico de Avalon Hill: “Advanced Squad Leader” de 1985, un laberinto de reglas y excepciones apto para los jugadores más curtidos. “Waterloo 1815” y “La batalla de Trafalgar” superan la sencillez de “Memoir’44”, son más complicados que el brillante “1775” y se quedan en un nivel de dificultad medio, que no tiene porqué amilanar al neófito.
Imagen procedente de universolamaga.com
En estas Navidades…
Concluimos. Hay muchos editores, muchos tipos de juegos, estilos y rangos de dificultad de aprendizaje. Hay foros de discusión, tiendas en línea, blogs, tutoriales de you tube que te explican cómo jugar a casi cualquier juego publicado en España. Es un mundo vasto, accesible, que depara largas horas de gozoso disfrute. Y en internet hay numerosas tiendas para comprarlos (y en Vigo unas cuantas librerías disponen de juegos de mesa).
El mundo lúdico, en definitiva, no se acaba en el naipe español o el “Trivial Pursuit”. Hay muchas opciones para hacer de una tarde entre amigos una jornada especial, original y muy, muy divertida. Y tenemos opciones para absolutamente todos los gustos, de juegos para niños a verdaderos retos adultos. Anímense, la época es idónea.
Artículos relacionados:
Navidades entre juegos de mesas