Esta es la cola del IFEVI para vacunarse contra el Covid19. A pesar de la apariencia, los tiempos de espera son muy razonables porque todo está bien organizado, hay que reconocerlo. Sin embargo, llama la atención que a la puerta del centro ferial, justo al atravesar la puerta de acceso, esté instalado un puesto de venta de churros.
Quizá sea que los churros ayudan a crear un ambiente festivo y a calmar los nervios de quienes esperan. Todo sea para facilitar la lucha contra el virus. Pero sería mucho más fácil el control de la pandemia si los test de antígenos fueran gratuitos como lo son en otros países, o siquiera mucho más baratos, porque, a fin de cuentas, el virus también está sirviendo para que algunos negocios resulten mucho más florecientes a costa del bolsillo de la mayoría.