A los numerosos cruceros que llegan al puerto con turistas de las más variadas nacionalidades también se suman otros forasteros que llegan en tren, en autobús o en coche particular. Este mes de octubre, en concreto, está resultando un éxito que favorece al comercio y, sobre todo, a la hostelería viguesa. Así es, que esta fotografía, tomada en la calle de las ostras, demuestra que la ciudad de Vigo está a tope.