En mayo de 1939, se presentó en Vigo el cineasta nazi Karl Ritter, acompañado de un potente equipo de rodaje de la UFA, la gran compañía alemana nacida durante la República de Weimar, pero ya convertida en la mayor herramienta de propaganda de Adolf Hitler. Ritter era un hombre popular en el III Reich, porque había rodado varias ardorosas películas bélicas, a medio camino entre Leni Riefenstahl y Frank Capra. Su film ‘El joven soldado hitleriano Quex’ es en esa época un clásico del nazismo, ya que la canción de su banda sonora terminó siendo el himno de las Juventudes Hitleriana: Vorwärts! Vorwärts! (‘¡Adelante!, ¡Adelante!)
Semejante personaje fue recibido con enorme cariño en la ciudad, donde había una sede del Partido Nacional Socialista (NSDAP) y una sección local de las Juventudes Hitlerianas que, entre otras actividades, en verano hacían excursiones a las islas Cíes, suponemos que asustando a las gaviotas dando vivas al Führer.
Ritter llegó a Vigo con su equipo de cámaras procedente de León, donde Franco acababa de presidir un acto de despedida de la Legión Cóndor, la fuerza aérea enviada por Alemania en apoyo a la insurrección española. Vigo sería el lugar del embarque de los seis mil soldados y la UFA quería inmortalizar el momento. Estaban rodando el documental “En la lucha contra el enemigo mundial” (Im Kampf gegen den Weltfeind), un largometraje propagandístico en el que la Luftwaffe arrasaba a los malvados bolcheviques en España, en defensa de los valientes ‘patriotas franquistas’. Del bombardeo de Guernica, en abril de 1937, por supuesto no se decía ni mu.
Gracias a Ritter y al equipo de la UFA (Universum-Film AG), contamos con imágenes de cine del Vigo de 1939 y de la despedida de los milicianos Cóndor. Este metraje se conserva en la Filmoteca de Alemania en Berlín y hemos conseguido copias, que usamos en el largometraje documental ‘A Arañeira’, estrenado en el año 2007.
El episodio registrado en la película fue una demostración internacional de fuerza de Hitler. El 23 de mayo, llegan a la ría de Vigo cinco trasatlánticos germanos para trasladar a las tropas. Se trata de los cruceros Robert Ley, Wilhel Gustloss, Der Deutsche, Sierra Córdoba y Stuttgart. Los dos últimos atracan en los muelles mientras que los otros tres fondean en medio de la ría. El Stuttgart desembarca material quirúrgico y medicamentos, regalo del Führer al Caudillo. También trae 600 toneladas de harina como obsequio al Auxilio Social.
La prensa del momento canta las grandezas de la flota de transporte del Reich: “Estos buques pertenecen a la Asociación del Frente del Trabajo, denominada La Fuerza por la Alegría, merced a la cual y mediante una módica cuota, pueden efectuar los obreros alemanes frecuentes viajes marítimos por todo el Continente, aprovechando las vacaciones”. Faltan pocos meses para que sea el ejército nazi el que ‘viaje’ por todo el continente, desde los Pirineos a los Urales.
En la noche del 23 de mayo sucesivos trenes comienzan a desembarcar en la estación de ferrocarril de Urzaiz a las fuerzas nazis, comandadas por el Barón Richthofen, amigo personal del Mariscal del Reich, Hermann Goering. Mientras van llegando los más de seis mil soldados alemanes, repartidos en diez convoyes, se suceden en Vigo los festejos, con homenajes a Franco y al general Antonio Aranda, al que se nombra hijo adoptivo de la ciudad. El jueves 25 de mayo se celebra el acto principal de despedida de los escuadrones Cóndor, con un desfile por el centro de Vigo en el que marchan los seis mil soldados de la Wehrmacht y de la Luftaffe, desde la calle José Antonio (hoy Urzaiz) hasta el Paseo de Alfonso. “Al paso de los voluntarios alemanes por las calles viguesas -relata una crónica local- el público les hacía objeto de grandes muestras de afecto, aplaudiéndoles con entusiasmo, victoreando repetidamente a Alemania y a su Caudillo Hitler”.
En correspondencia, Von Richtofen entregaba al alcalde Suárez Llanos un retrato de Adolf Hitler, obsequio personal enviado expresamente por Hermann Goering como regalo a la ciudad. Sería interesante saber dónde terminó este cuadro…
Además del rodaje de la UFA, hay también fotografías de Pacheco, que conserva el Concello de Vigo. Y, sobre todo, algunas de las primeras fotografías en color tomadas en Galicia, que fueron hechas por Hugo Jaeger, fotógrafo personal de Adolf Hitler, quien decidió enviarlo a Vigo para inmortalizar el momento. Como vemos, el despliegue mediático del III Reich con aquel acto fue enorme.
Sin embargo, Karl Ritter no podría usar el metraje rodado en Vigo para su película “En la lucha contra el enemigo mundial”, que fue estrenada en tiempo récord, el 16 de junio de 1939 en el Ufa-Palast am Zoo de Berlín. Ante la premura de tiempo, las imágenes viguesas quedaron fuera, y se proyectaron en los cines alemanes como noticiarios antes de las películas.
Además, “En la lucha contra el enemigo mundial” tuvo poco recorrido. Porque, el 23 de agosto de ese mismo año, Molotov y Ribbentrop firmaban el Pacto de No Agresión Germano-Soviético, y no convenía enemistarse con Moscú. Los sóviets ya no eran tan malos como unos meses antes, y el propio ministro de Propaganda, Joseph Goebbels ,escribió en su diario sobre el largometraje: “No utilizable en este momento debido a la fuerte tendencia antibolchevique».
También fue prohibido el documental titulado ‘Legión Cóndor’, que el propio Karl Ritter, con el mismo equipo de la UFA, había rodado al mismo tiempo que su película. Durante la II Guerra Mundial, el cineasta seguiría rodando films patrióticos nazis hasta que, terminada la guerra, emigró a Argentina, hizo un intento fallido por recuperar su carrera cinematográfica.
Lo que sí nos quedan son los fotogramas para la historia. Retratan a lo largo de algunos minutos cómo desfilan por las calles del centro de Vigo los seis mil soldados alemanes de la Legión Cóndor, cómo son despedidos en el puerto vigués, jaleados entre banderas con esvásticas, y cómo zarpan a bordo de los grandes trasatlánticos hasta Hamburgo, donde serán recibidos por Goering.
Es otro pedazo de historia, narrado en celuloide, de Vigo en ‘La Lucha contra el Enemigo Mundial’.
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