El mismo día que se conoció la composición del gobierno local y los departamentos en los que Abel Caballero ha repartido a sus 16 concejales, el PP también quiso anunciar su propio reparto de tareas, con Elena Muñoz al frente de todas las áreas como coordinadora pero centrándose especialmente en Hacienda, Fomento, Contratación, Limpieza, Transporte y Proyectos Europeos.
Así, el grupo popular ha optado por distribuir las responsabilidades entre los concejales siguiendo las nuevas áreas de gobierno marcadas por el PSOE, si bien ha añadido cometidos específicos no concretados en el reparto del alcalde, como Empleo o Parroquias.
Tareas para los ediles populares
En esta distribución del grupo municipal del PP, el número dos de la lista, Diego Gago, se ocupará de los temas de Juventud, Turismo, Voluntariado y Fiestas. José Manuel Figueroa, número tres, controlará los departamentos de Urbanismo y Deportes, en los que cuenta con amplia experiencia de gestión. Las áreas de Sanidad, Medio Ambiente y Cementerios corresponderán al número 4 de la candidatura, Ángel Piñeiro. Mientras, la número cinco, Elena González, se ocupará de la Participación Ciudadana, la Política Social, Igualdad y Parroquias.
Para Miguel Fidalgo se queda el control de las funciones relativas a la Promoción Económica, el Empleo, Comercio, Seguridad, Régimen Interno y Patrimono. Y Teresa Egerique trabajará fundamentalmente sobre las áreas de Educación, Cultura y también Parques y Jardines.
Muñoz Fonteriz, que coordinará la acción de todos los ediles, reiteró su intención de que las especializaciones de cada concejal “no impidan el desarrollo de un trabajo horizontal en el que todos estemos al tanto de lo que hacen todos para mejorar nuestros resultados”. La portavoz popular citó como “prioridades fundamentales” para el PP las medidas que impulsen la recuperación económica, la generación de empleo y las políticas de apoyo y desarrollo social.
Asimismo, añadió que su grupo municipal velará “por una mayor transparencia en la gestión pública del Concello”, y por el “fomento del diálogo y la colaboración entre el ayuntamiento y los vecinos, los colectivos sociales, económicos, deportivos y culturales, así como con el resto de instituciones públicas”.