1. Barrio do Cura
Fue en diciembre de 2017 cuando VIGOÉ adelantó la noticia de que la promotora Gestilar tenía un firme interés en recuperar el proyecto para reformar el abandonado Barrio do Cura. Desde ese momento el Concello de Vigo ha dado todos los pasos necesarios para facilitar a la empresa ese desarrollo tan deseado. Sin ir más lejos, el pasado 21 de mayo se anunciaba que la Gerencia de Urbanismo ya tenía previsto aprobar la modificación puntual del Plan Xeral de Ordenación Municipal para dar el visto bueno al proyecto.
Además, en febrero se firmó la licencia para derribar el asilo, punto de partida y símbolo del inicio de las obras, que comenzaron hace unas semanas. El proyecto contempla la demolición del conjunto del barrio, que durará un año y la construcción de nuevas viviendas, el 30% de ellas de protección oficial. Además, Torrecedeira se conectará con Poboadores, se hará una calle vertical desde O Berbés hasta el Paseo de Alfonso, se crearán más de 900 plazas de aparcamiento, se habilitará una plaza pública de 5.000 metros cuadrados y 4.000 metros cuadrados de zonas verdes. En este ámbito se podría incluir la recuperación de la Panificadora. Todo ello debería ser una realidad en el año 2022.
2. Porta do Sol
Justo antes de comenzar la campaña, Abel Caballero dio los detalles de la peatonalización de una de las zonas más céntricas de Vigo. Este proyecto viene de lejos pero empezará a forjarse en otoño con el inicio de las obras, que durarán dos años. Los trabajos deberán ser compatibles con las múltiples celebraciones y actos que se celebran en esta zona, como la Navidad, la Reconquista o el Carnaval.
La inversión ascenderá a 17 millones. Los vehículos circularán por un túnel subterráneo y gracias a ello se ganará un espacio público peatonal de 8.000 metros cuadrados, en el que se instalarán, entre otras cosas, elementos singulares como un estrado-escenario o una réplica de las islas Cíes.
Además, también se contempla la construcción de una rampa mecánica que subirá desde la calle Carral para así dar continuidad al ‘Vigo Vertical’ hacia las escaleras que llevan desde Segunda República hasta el entorno del ayuntamiento.
3. Avenida de Madrid
Otra reforma que lleva años esperando y que por fin se ha desbloqueado. De hecho, la semana pasada Caballero anunciaba que el Concello de Vigo estaba a punto de aprobar la adenda del convenio con el Ministerio de Fomento para que el presupuesto de la actuación subiera de 10 a 14,4 millones.
Las obras se prolongarán durante dos años y eliminarán las verjas que actualmente separan los carriles. Se instalará una fuente ornamental con un juego de luces, agua y música, además de una escultura, una nueva medianera y “mecanismos de bienvenida”.
Para no obstaculizar el tráfico los trabajos se acometerán en dos fases, primero en una margen de la vía y luego en la otra.
4. Centro Vialia
Aunque no depende directamente del Concello, éste es uno de los proyectos en los que más se ha implicado el alcalde de Vigo por incluir el desarrollo del proyecto de Thom Mayne, que es una apuesta personal. Aquí las obras ya han comenzado y llevan medio año de progreso, aunque todo apunta a que el conjunto de la actuación –que incluye integración de la estación de autobuses, el centro comercial y una conexión con García Barbón- no se hará realidad hasta principios de 2021.
El complejo comercial que habrá en su interior será uno de sus grandes atractivos, pero también lo pretenden ser los espacios abiertos que lo rodearán. En la parte superior está proyectado un mirador con vistas a la ría con una explanada que servirá de punto de encuentro para los vigueses, que podrán acceder desde distintas entradas. También confluirán la pasarela y el ascensor que conectará Vía Norte con García Barbón. Asimismo, la plaza de la estación se humanizará para generar otra zona de esparcimiento ciudadano.
La superficie destinada a uso lúdico incluirá puestos y locales de gastronomía o terrazas. Además, el comercio estará muy presente con diferentes firmas que abrirán sus tiendas en el interior. El Concello y Ceetrus, compañía que se encargará de la construcción del Centro Vialia, han asegurado que contactarán con nombres importantes pero todavía no han desvelado detalles más allá de Alcampo.
5. Estadio de Balaídos
Una obra que debía estar acabada ya pero que sólo tiene una grada terminada y otra a punto de finalizar con la sustitución de los asientos de Río Bajo. Y otro proyecto que Caballero ha sacado a relucir durante la campaña electoral. Las obras de Marcador empezarán en otoño y durarán 14 meses. A continuación, se procederá a reformar Gol, grada que también se acercará al terreno de juego, y a construir el aparcamiento. La previsión es que la remodelación del estadio se completé a lo largo del próximo mandato.
En este contexto, las relaciones con el Celta también marcarán los próximos cuatro años, sobre todo en lo relativo a la concesión del estadio que pretende hacer el Ayuntamiento y que el club rechaza.
6. Abastecimiento
Según Caballero, el asunto más importante al que se enfrenta la ciudad. Se trata de un problema que surgió a lo largo del pasado ciclo de gobierno con la sequía de 2017 y que debería quedar resuelto antes de 2023, aunque no será fácil. Por el momento se ha logrado el consenso necesario para realizar un estudio que determine cuál es la mejor solución para garantizar el abastecimiento de agua para Vigo y su comarca a largo plazo.
Una vez que se tenga la conclusión, se procederá a acometer la obra recomendada, que será más o menos compleja en función de lo que digan los expertos. El Concello, en principio, apuesta por construir una nueva presa junto a Eiras, aunque no se cierra en banda a otras alternativas.
7. Dotar a Vigo de un plan de urbanismo
Cuando llegó a la Alcaldía allá por 2007 prometió tener aprobado el Plan Xeral de Ordenación Municipal ese mismo año. Sin embargo, doce años después la realidad es que la ciudad carece de este importante documento y avanza a base de la llamada Ley Vigo, de modificaciones puntuales y, ahora, de la ordenación provisional.
El PXOM como tal, anulado por los tribunales, no estará listo hasta 2022. Si es que no surgen problemas. Este es otro de los grandes retos del Gobierno local para que no perder inversiones y peso empresarial.
8. Gran Vía
El gran proyecto fallido del pasado mandato tras ser paralizado, en parte, por Patrimonio. Sin embargo, el Ayuntamiento ha encontrado una pequeña salida para ‘trocear’ la actuación y acometerla inicialmente por fases. Caballero pospuso el inicio de las obras para después de las elecciones municipales y este mismo martes 28 de mayo ha anunciado que reactivará la maquinaria a finales de julio.
La instalación de las escaleras mecánicas ha contado con mucha oposición por el cambio que generaría en el bulevar. Además, el traslado del Monumento al Trabajo a Isaac Peral apenas tiene adeptos y también ha sido bloqueado por la Xunta de Galicia.
9. Hotel Samil
Tras completarse el derribo del antiguo complejo, Attica 21, empresa de Manuel Jove, tiene por delante el reto de levantar un nuevo inmueble de 4 estrellas, que tendrá una estructura más horizontal y sólo cuatro alturas.
Los planes de la compañía pasan por una remodelación total del lugar, que se adaptará más al entorno. Se habilitarán 125 habitaciones -diez menos que antes-, piscina, spa, sala de convenciones y unas cien plazas de aparcamiento. Para hacerlo realidad, la cadena invertirá casi 21 millones de euros. La previsión es que el nuevo hotel Samil abra sus puertas en 2021, aunque en los últimos meses apenas ha habido avances y los escombros se acumulan sobre el terreno.
10. Recuperación de As Avenidas
El conflicto con el Puerto de Vigo va para largo porque dependerá en buena parte de lo que dicten los tribunales, no sólo por lo que diga la jueza en torno al suceso de O Marisquiño, sino porque todo apunta a que la reforma del paseo terminará en pleito.
El organismo que preside Enrique López Veiga sigue entendiendo que la actuación corresponde al Ayuntamiento y este sostiene lo contrario, por lo que la Autoridad Portuaria prevé llevar el asunto ante el juzgado.
La propuesta de la Zona Franca de Vigo de hacerse cargo de todo aprovechando la construcción de un aparcamiento subterráneo no convence al Puerto, que le ve un difícil encaje legal. Sea de quien sea la responsabilidad promete convertirse en un tema recurrente a lo largo de los próximos cuatro años.
11. Conflictos laborales
Los funcionarios que dependen del Ayuntamiento de Vigo están bajo mínimos. Tanto el personal administrativo como los cuerpos de seguridad. De hecho, la Policía Local y los Bomberos han llevado a cabo protestas en las últimas fechas, llegando a plantarse ante la puerta del alcalde, para reclamar más efectivos y mejoras económicas.
Sin embargo, el Gobierno local no ha cedido un ápice. Las reivindicaciones no sólo no han servido para acercar posturas sino que la relación entre las partes se ha tornado aún más tensa. Además, los bomberos están alertando de la falta de seguridad que genera su situación. El alcalde, este mismo martes, se ha negado a hacer declaraciones sobre el tema.
12. Concesionarias
En el próximo mandato se acaba la concesión del transporte público de autobús y del suministro de agua. El Concello de Vigo ya ha anunciado que no renovará a Avanza (Vitrasa) y que quiere un servicio más adaptado al siglo XXI, incluso con paradas a demanda en el rural. En lo que respecta a Aqualia, la oposición ha pedido que se reformule el contrato y que, entre otras cosas, se cobre a los usuarios por consumo real, sin mínimos. No parece que Caballero esté por la labor, ya que la empresa juega un papel crucial a la hora de poder acometer tantas humanizaciones.
+1. Humanizaciones
Precisamente humanizar es el propósito principal del día a día del alcalde, que aspira a llegar a todos los viales de la ciudad. Desde arterias como García Barbón hasta pequeñas calles como la Baixada á Estación pasando por espacios céntricos como Ronda Don Bosco. El regidor vigués sabe que, aunque las obras generen inconvenientes, a la larga acaban contentando a los vecinos y suman votos. Por si hubiera alguna duda de sus intenciones en la campaña electoral prometió decenas de nuevas calles reformadas.