Un vecino de Vigo de 39 años protagonizó este martes el caso más destacado dentro de las intervenciones que está realizando la Policía Local de la ciudad estos días de confinamiento. El hombre fue interceptado por una patrulla en la zona de O Calvario a las 12:30 horas al observar los agentes que circulaba en una bicicleta eléctrica hacia la calle Martínez Garrido.
Al preguntarle por el motivo de su desplazamiento, el ciclista alegó que iba al supermercado, a pesar de que acababa de pasar por uno situado a 100 metros. En ese momento, “comenzó a increpar a los agentes por haberle parado y se negó a facilitar dato alguno”, informa el cuerpo municipal. Finalmente, accedió a identificarse “de manera verbal, pero facilitando información parcial, alegando haber olvidado datos importantes para su plena identificación”.
En ese momento, los policías se dieron cuenta de que presentaba síntomas de hallarse bajo el efecto de las drogas y acabó dando positivo en cannabis y anfetaminas. Adicionalmente, se la realizó un cacheo corporal y se le encontró una navaja tipo mariposa, que le fue intervenida.
Los agentes, pertenecientes a la unidad de transportes, comprobaron que la bicicleta tenía instalado un motor eléctrico, con un acelerador, y verificaron que el motor activaba la circulación de la rueda trasera sin necesidad de pedaleo, algo que no está permitido en las bicicletas de pedaleo asistido.
Por este motivo, se procedió a su inmovilización a la espera de confirmar si podría ser considerado un ciclomotor debido a sus características técnicas. De ser éste el caso, el conductor podría haber incurrido además en una causa penal al circular sin puntos en el carnet.
Según ha informado este miércoles Abel Caballero, la Policía Local cursó 32 denuncias este martes en Vigo. Algunas de ellas fueron impuestas Isaac Peral, donde se detectó a una persona que iba a visitar a un familiar, o en Guixar, donde se vio gente paseando. Además, fue necesario intervenir en el mercado de abastos de la calle Coruña para controlar el aforo y en el Camiño do Pazo, donde un hombre estaba quemando rastrojos en una finca.
Sólo durante el 31 de marzo, fueron identificadas 363 personas y controlados 1.060 vehículos. El cuerpo municipal ha tramitado 541 denuncias desde el 16 de marzo.