La investigación, según informó este viernes la Comisaría de Vigo, se inició a finales del pasado mes de agosto tras tener conocimiento el grupo de UDEV-Drogas de la existencia de una ruta de envío de cocaína desde Paraguay a España mediante correspondencia postal y utilizando identidades falsas o ficticias, así como aportando direcciones reales, pero en connivencia con el verdadero receptor de la sustancia.
Meses atrás el grupo de la UDEV había informado al Juzgado del hallazgo de un sobre conteniendo cocaína en un establecimiento de hostelería de Sanjurjo Badía, y posteriormente se había detectado en Correos un paquete con hachís en su interior.
La Comisaría señala en un comunicado de prensa que los esfuerzos se centraron en localizar a los destinatarios, así como las rutas de envío y orígenes de dichos paquetes, descubriendo que varios de ellos habían confluido en diferentes épocas en una vivienda de Chapela. Dicho domicilio había permanecido desocupado durante algún tiempo, pero a principios de este verano su dueña había vuelto a Vigo, por lo que centraron sus pesquisas sobre esta persona.
Los investigadores comprobaron que semanalmente llegaban diferentes envíos desde Sudamérica a esta vivienda, si bien la propietaria no se hacía cargo de ellos al no corresponderse su nombre con los destinatarios que figuraban en ellos. «Tras una compleja labor de investigación se logró identificar al remitente de los envíos, el cual resultó ser un ciudadano español, con amplios vínculos con el narcotráfico, que residía en Paraguay desde hacía nueve años y tenía previsto realizar un viaje a España en fechas muy próximas», explica la Policía.
Además, constataron que la mujer residente en la vivienda desconocía el contenido de los sobres y el hecho de que su domicilio se utilizaba para el envío masivo de sustancias estupefacientes. Por todo ello se solicitó autorización al Juzgado de Instrucción Nº 1 de Vigo para proceder a la apertura de los sobres y realizar las pruebas y análisis.
Los envíos requerían de una alta tecnificación ya que utilizaban grandes medidas de seguridad para burlar los controles existentes en aeropuertos y estaciones y también empleaban identidades ficticias tanto para el remitente como para el destinatario, complicando de ese modo la investigación.
«Dada la violencia y peligrosidad de este varón se elaboró un complejo dispositivo para su detención en el momento en que llegase al aeropuerto, desplazándose para ello varios agentes que procedieron discretamente a interceptarlo en una zona aislada del aeropuerto», señala la Comisaría. Tras el arresto, fue puesto a disposición del Juzgado de Instrucción número 1 de Vigo.