La operación fue llevada a cabo por funcionarios del Resguardo de la Guardia Civil, integrados en la Unidad de Análisis de Riesgo (UAR) de Vigo y de la Vigilancia Aduanera de la Agencia Estatal de la Administración Tributaria (AEAT).
Según informó la Comandancia de la Guardia Civil, durante la visita de fondeo, práctica que se realiza con barcos mercantes y pesqueros procedentes de orígenes de riesgo, los funcionarios actuantes descubrieron el dinero oculto en una mochila escondida en el camarote del capitán, otra mochila y un paquete escondidos bajo un asiento en el puente de mando, y en un paquete incluido en el bolsillo de una funda de ordenador portátil.
«En la documentación presentada con anterioridad al fondeo, el denominado manifiesto, no figuraba el dinero posteriormente intervenido, para el que tampoco se había realizado la obligatoria declaración informativa por entrada de efectivo superior a 10.000 euros, modelo S1, que debe presentarse ante la Aduana», explica la Guardia Civil.
Los hechos fueron denunciados ante el Juzgado de Instrucción nº 3 de Vigo, por la presunta comisión de un delito de contrabando, depositándose el dinero en la cuenta del Juzgado.