Un hombre acusado de un delito continuado de agresión sexual a un menor, hijo de la que entonces era su pareja, y que es juzgado este lunes y este martes en la sección quinta de la Audiencia Provincial de Pontevedra (con sede en Vigo) se enfrenta a 14 años de prisión, pero sus problemas con la justicia podría incrementarse, ya que uno de los testigos que ha declarado en la vista, hermano del denunciante, ha confesado ante el tribunal que el procesado también abusó de él cuando era niño.
En el juicio, en el que la víctima ha declarado a puerta cerrada (y el acusado lo hará en último lugar, este martes), han comparecido la madre del denunciante y uno de sus hermanos. Precisamente, éste último ha hecho una confesión inesperada ante el tribunal, al afirmar que, cuando era pequeño, con «12 ó 14 años», el acusado también había abusado de él.
«Lo estuve pensando mucho, y decidí esperar a este juicio para contarlo, es la primera vez que lo digo», ha explicado, antes de relatar que el acusado, en ese momento pareja de su madre, le realizó tocamientos e intentó masturbarlo cuando era niño, con la excusa de comprobar si padecía fimosis. «Debería haberlo denunciado en su momento», ha apuntado.
Igualmente, ha reconocido que, cuando su hermano contó ya siendo adulto que había sido víctima de agresiones sexuales por parte de este hombre, intentó disuadirlo para que no denunciase los hechos por el «daño» que ese proceso iba a causar a la familia. «Yo quería proteger a mi madre (…), me arrepiento, debería haberlo apoyado desde el primer momento», ha manifestado.
Según su testimonio, él y su familia se enteraron de los supuestos abusos años después, cuando su hermano ya se había independizado y, en la cena de Navidad de 2017, el denunciante tuvo una discusión con el acusado y le echó en cara que era «un pederasta».
Hombre «muy violento»
Tanto este testigo como su madre (progenitora también de la víctima) han declarado ante la Sala que el acusado tenía un carácter «muy violento», que era frecuente el maltrato psicológico en el ámbito familiar, y que era consumidor de estupefacientes, además de tener problemas de adicción al sexo.
Así, la madre también ha manifestado que su hijo «le tenía terror» al acusado y se sentía «amenazado» por él, según él mismo le relató. «Mi hijo nunca lo aceptó y él (acusado) siempre lo insultaba», ha explicado, antes de admitir que ella también tiene miedo de posibles «represalias» por parte del encausado que, ha apuntado, también le llegó a «meter mano» a su madre (suegra del acusado).
En la sesión del juicio celebrada este lunes ha comparecido también como testigo una joven que mantuvo una relación sentimental con el denunciante, y a quien éste le contó que había sufrido abusos sexuales por parte de la pareja de su madre «durante años, en repetidas ocasiones».
«Pánico» al acusado
Según ha narrado, el chico tenía problemas para conciliar el sueño, tenía miedo de salir a la calle, e incluso dificultades para mantener relaciones sexuales con ella. «Le tenía pánico al acusado, porque le había amenazado con hacer daño a su familia», ha explicado, y ha añadido que le contó que se decidió a denunciar porque temía que el acusado pudiera estar «haciendo lo mismo» con otro hermano, el más pequeño, fruto de la relación entre su madre y el propio encausado.
Según el escrito de acusación de la Fiscalía, los hechos que se enjuician en la Audiencia ocurrieron entre 2002 y 2010, cuando la víctima era menor de 16 años.
El ministerio público solicita 14 años de cárcel por un delito continuado de agresión sexual sobre un menor, con prevalimiento del acusado por la existencia de una relación de superioridad y parentesco. El juicio continuará este martes con las declaraciones de varios peritos, entre ellos, forenses, y del propio acusado.
Tras la declaración del hermano del denunciante, reconociendo que también fue abusado por el procesado, la Audiencia puede, de oficio, deducir testimonio para abrir otra causa contra él, por esos otros supuestos abusos.